martes, 24 de julio de 2007

Consejos para neoparisinos


Me he mirado las manos y aquel "callo del estudiante", que durante mis años de colegio no desaparecía ni en verano, es ahora prácticamente imperceptible. Sin embargo, han aparecido otros nuevos, de llevar bolsas de la compra y maletas por el metro de París. He aquí unos cuantos consejos sobre cómo actuar en el transporte público de la capital francesa, basados en la experiencia de meses y meses:
  • Si ve a una mujer española a la salida del tren Thalys bloqueando la puerta, embelesada en su conversación vía móvil de "ayyyy, Daviiiiid, ¿cómo me dices esoooo...?" dos minutos antes de que las puertas se abran, dele una buena patada en el culo de mi parte. Seguro que es la misma pesada que la última vez nos tuvo esperando a todos, y lo que es peor, escuchando sus incongruencias (yo en este caso habría dicho gilipolleces) de voz en grito durante 15 minutos, que además tuve el infortunio de comprender: "No veas la expectación que tengo a mi alrededor... No, no me entiende ninguno... Y si me entienden, pues me da igual, porque mira, se mueren de la envidia (¿?)". Como me tengo por una mujer educada, en lugar de decirle "no me extraña que cree expectación, porque no creo que hayan visto en su vida a una mujer más desconsiderada [barra] tocapelotas que usted", sólo le grité "¡¡PERDONE!!", con lo que ella dedujo que yo era española y el resto del vagón espero que dedujera que no apoyaba en absoluto el comportamiento de mi compatriota. Con qué especímenes se cruza una por la vida. Mi maleta empieza a pesar.
  • Si va a tomar el métropolitain con maletas de esas que exceden las medidas permitidas por la UE como equipaje de cabina, plantéese coger en taxi. Sí, me dirá, el metro le cuesta 2 euros y el taxi 40. Ahora yo le digo, ¿cuánto cree que le van a costar las sesiones de fisioterapia? Francamente, mi espalda vale más. Para aquellos osados de bolsillo joven como yo a quienes no quede más remedio, les recuerdo que no pasen por la canceladora intentando que quepa la maleta al mismo tiempo. Ya se lo digo yo: no cabe. En la estación de Gare du Nord hay un hueco en un lateral a tal efecto... Introduzca la maleta, valide su billete, recoja su maleta del otro lado. Lo máximo que se puede ganar si no se busca dicho huequecito es una escena esperpéntica con altas dosis de ridículo, cosa que la mayoría preferimos evitar.
  • Ármese de paciencia: en los trasbordos (valga de ejemplo el de Montparnasse) no hay más que escaleras de las de toda la vida... Probablemente caiga inconsciente antes de lograr contar todos los tramos. Deje de soñar con las mecánicas hasta la casi mismísima boca de metro. Y procure pedir ayuda, nadie se le va a tirar encima a cogerle las maletas, y si lo hacen, ojo que no sea para robarlas. Esto es una gran ciudad. La picaresca no nació con el Lazarillo de Tormes, ¡nació con los guiris en el metro! (Curioso que tendamos a olvidar que, cuando viajamos, los guiris somos nosotros...).
  • Subidas, bajadas, calor, dolor... mucho dolor. Sus dos pies han alcanzado la ruta final después de tres trasbordos. ¡Enhorabuena! Siempre habrá niñas de la mano de su mamá, de a partir de siete años, mirándote fijamente, como si hubieran decidido de forma unilateral jugar a aguantarte la mirada. Igual miran tus gotones de sudor, tu cara de extranjera, la maleta sucia, el atisbo de mala leche (me hace pensar en "Suspicious Eyes", de The Rakes). Ánimo madres, lección número dos para sus niños: "Señalad con el dedito. ¡Muestra inequívoca de educación y buen gusto!".
  • Pero ahora concéntrese y respire hondo... No importan ni las miradas, ni los calambres, relájese... Piense en "les grandes vacances", Le Grand Bleu, todo a lo grande; la ciudad se presta a ello. La Torre Eiffel allá al fondo, y siga mirando por la ventana... No es un espejismo, está en París. Todos los esfuerzos valen la pena. Tiene mi palabra.


Escuchando "Consolation Prizes" he creído descubrir por qué Sofia Coppola se empeñó en hacer una película de mierda (perdón: podría haber estado bien si no hubiera escrito el desarrollo del personaje principal en estado de embriaguez. Le salió de plano a nulo). ¿Fue para estar cerca de su amor, el cantante del grupo versallés Phoenix? No te preocupes Sofia. De mujer a mujer, si es por eso te defiendo. Aunque ni lo quieras, ni nada, Sofia, y sea sólo por tener a alguien que te lleve las maletas.





[Suena: Consolation Prizes - Phoenix]

(Copirrait de la primera foto: mis "frikis neoparisinas")

1 comentario:

And I know it's old fashioned to say so dijo...

de dónde ha salido esto? ha crecido cual hierbajo de esos que no esperas. pero sin menospreciar a tu escrito, que no es un hierbajo por supuesto si no una flor hermosa. no me hagas caso,se me está yendo. es que son las 2 de la madrugada de un viernes y estoy superaburrida sola en casa y dónde estás corazón se ha acabado y ya no sé qué hacer con mi vida (i don't know what to do with myself cantaban los white stripes, bueno no es suya original esa canción, no sé de quién es xo tengo en la mente la de los WS, en fin qué más da) muy fuerte, han salido las fotos de la pantoja cuando la detuvieron esas de frente y de perfil con el numerito y la altura y estoy consternada. volviendo a tu bella flor, cargar con una maleta es jodido, pero como tu bien dices luego vale la pena. yo con lo floja que soy no hubiera aguantado ni medio transbordo.