sábado, 6 de septiembre de 2008

Madrid era una fiesta

Todas estaban allí. Los dos patitos de Beatriz, Irene y su gato acostao, el bocadillo-ACNUR de Esther, los sabios consejos de Barbi, los mimitos de María, una sensación de premorriña y desarraigo raros que comenzaba a aflorar en Pau... Miento, faltaba Julia, pero con ella ya nos resarcimos el miércoles noche.

Inauguración de Incóginito, jueves noche en la sala Taboo, con Tomás y Patru.


Mañana estaré sentada en la maleta para conseguir que cierre, me tomaré dos valerianas antes de poner rumbo a la T-4, y pensaré en lo paradójico de que yo vaya a pasar 6 meses en China mientras ellas dos van a vivir en... París. Y Sara en Milán. Lo que es la vida. Y Barbi, por una puñetera vez en años, ¡quietecita en Madrid! Tal vez esto sea un preámbulo de lo que nos depare el futuro, la dificultad creciente de coincidir todas no ya en la misma ciudad sino en el mismo continente.
Esther me ha regalado una foto de sus amígdalas. Dice que tengo que llevármela, que me dará suerte.


Pues eso. Suerte, amigas.